Corte de Constitucionalidad, la cúspide de la estructura de los órganos jurisdiccionales en materia constitucional

Fragmentos del editorial con los que coincido plenamente.

Transcribo:

¿Qué nos separa hoy? Intereses ideológicos, económicos, corrupción, impunidad, una cadena de traiciones a valores que se juró defender. Cada quien ve por su propio interés pese a que está en juego el sistema de justicia y el estado de derecho. La prioridad hoy es salvar las cortes de justicia.

Es cierto que se ha señalado a magistrados de la corte constitucional por responder a una agenda ideológica y debilitar la certeza jurídica, pero por el bien de Guatemala y la democracia se debe salvaguardar la absoluta independencia de la corte de constitucionalidad CC.

La CC tiene la última palabra sobre el sentido y alcance de la constitución y las leyes; debe ser la institución más respetable y respetada de la república.

Ciertamente esas virtudes se ganan y habrá que seguir trabajando en ello. Sin embargo, la sobrevivencia de la república depende que veamos la inmensa gravedad que representa el hecho que candidatos a magistrados de las cortes de apelaciones y corte suprema de justicia, respondan a políticos corruptos, capos mafiosos y delincuentes confesos. Dichas personas pretenden asfixiar los logros del sistema de justicia para mantener el secuestro del Estado.

Los jueces no deben prestarse a ser monaguillos o monigotes de una clase corrupta, comprometer su reputación a cambio de un puesto en las cortes para proteger y proveer impunidad a la peor escoria de la sociedad a cambio de dinero.

Muchos protegidos están en el congreso y por ello no es casualidad que desde las cárceles y desde el congreso se conspira y se intenta el secuestro de la justicia.

Guatemala cambiará y construirá una democracia, derecho e instituciones sólo si estamos dispuestos a sumir el costo y los sacrificios que esto representa. Pero hoy estamos en riesgo que Guatemala se convierta en un narco-estado criminal.

Educación y practica de instituciones políticas que se dan a respetar llevará tiempo.

FIN de la transcripción de fragmentos del discurso de Dionisio Gutiérrez ver aquí.

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Yo agrego que el sacrificio consiste en negar cualquier consideración y apoyo a cualquiera que se acerca a intereses criminales y tolerar a los magistrados de la CC, pese a ser criticados por algunos, supuestamente, por seguir agendas ideológicas.

Legalmente el tribunal constitucional es nuestra máxima corte. Está colocada en la cúspide de la estructura de los órganos jurisdiccionales que imparten justicia constitucional. Apoyar ese orden constitucional establecido desde 1985 permitirá que continúe evolucionando el Estado de Derecho y fortalezca la institucionalidad del país.

La Constitución Política de la República de Guatemala establece que la corte de constitucionalidad es un tribunal cuya función es la defensa del orden constitucional. Le compete la interpretación final del alcance contenido en las normas de la carga magna. Es la única instancia para conocer impugnaciones contra leyes, convenios, tratados, disposiciones o amparos contra el congreso, la corte suprema de justicia, el presidente y el vicepresidente. Resuelve cualquier conflicto de jurisdicción en materia de constitucionalidad.

He jurado "acatar la constitución". La constitución dice que la Corte de Constitucionalidad es el máximo tribunal que interpreta el orden constitucional y acepto que en ese ínterin puede incidir con alguna tendencia ideológica; al final somos humanos sujetos de error. Pero estoy seguro que la constitución por ninguna parte favorece la actitud, apoyo, planes o actos criminales.

Nuestro compromiso debe ser con la constitución.

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